Hace dos años atrás, Assa Abloy -la compañía sueca madre de HID- empezó a invertir en distintas soluciones de seguridad. La primera compra grande que hizo fue la marca Fargo, líder en impresión de tarjetas de alta definición. La otra inversión importante que realizó fue en el segmento de Network Access Solutions. Gracias a ello, ahora HID tiene lectoras que funcionan en red y sistemas de control de puertas, ambos lanzados en nuestro país.

HID siempre estuvo asociada al acceso físico. ¿Ahora van por el lógico?
Es cierto. HID ahora está invirtiendo en el segmento de acceso lógico. Siempre fuimos una empresa muy focalizada en el acceso físico, pero ahora también estamos lanzando productos para la parte de acceso lógico.

¿A qué se debe el cambio?
Hoy en el mundo cada vez más transacciones se hacen directamente en la red. No solamente hablo de transacciones comerciales, sino también legales, por ejemplo. Muchos estudios de abogados ya envían sus documentos a través de la web. Por ello, consideramos vital proteger la información o la identidad de estos documentos que circulan por la red. Se trata de un negocio que está creciendo mucho y HID está apostando fuerte.

¿Qué soluciones tienen para ofrecer?
Tenemos una lectora de acceso lógico (Omnikey) que se puede utilizar directamente acoplada a una PC o una pequeña Hand Held. Para usarla, basta con presentar una tarjeta de acceso lógico que lleva una firma digital o un certificado digital y garantiza la identidad de la persona. La información está toda encriptada y su seguridad es muy alta.

¿Cómo ves el mercado de América Latina?
Al mercado de América Latina lo veo muy bien. El porcentaje de crecimiento de negocios en América Latina es mucho más alto que en otros sitios del mundo. Estamos creciendo en un 40% al año: esas son tasas muy altas y seguimos viendo mucho potencial.
Otra cosa que notamos en América Latina es que muchas veces no hay transición de la tecnología. Se cambia de golpe, salteando en el camino etapas intermedias.
En los mercados desarrollados los cambios son más graduales.

¿Y en el caso puntual de Argentina?
En el caso particular de Argentina el crecimiento económico se sintió mucho en estos últimos años y eso nos ayuda mucho para lanzar novedades de productos. Se trata de un mercado particular. Por ejemplo, a diferencia de México, Argentina no es un mercado tan dependiente de lo que sucede en Estados Unidos y eso se nota mucho.

¿Cuáles son las deudas pendientes de la región?
En Estados Unidos trabajamos mucho con consultores; es una figura muy respetada y que ofrece mucho feedback al negocio. En Latinoamérica eso no está aún muy instalado.Aquí la gente se maneja mucho a través de los contactos directos y creo que falta profesionalizar esa tarea. Otra cosa que nos está faltando en América Latina son los informes y las encuestas de mercado. Lo hablamos en la reunión con la gente de ALAS; sin embargo, creo que hemos mejorado mucho, en especial, en estos últimos dos años.

¿Cómo evoluciona Seguriexpo?
A Seguriexpo la veo muy bien. Mucha gente y calificada, que es lo más importante. Yo participo mucho en exposiciones en los distintos países y la verdad es que Seguriexpo tiene un nivel muy bueno. Aquí te das cuenta de que la gente que asiste conoce el producto y sabe a qué viene. Otra cosa que percibo es que antes la gente de América Latina iba a la exposición de Miami. Ahora eso está cambiando, porque cada país tiene su propio evento local y son cada vez mejores. Además, los lanzamientos son más simultáneos que hace tiempo atrás. No necesitan viajar para conocer las últimas novedades y eso habla de la gran preocupación que tienen los fabricantes por desarrollar nuevos mercados.
Por último también veo que los distribuidores y los integradores locales se están profesionalizando a un mejor nivel. Con sólo visitar algunos stands, uno lo percibe: el nivel de conocimientos y actualización mejoró mucho.

Control de stock y monitoreo por RFID
HID está poniendo mucho foco en la identificación por RFID. Se trata de un mercado específico, diferente al de las tarjetas y los accesos lógicos, que está muy consolidado en Europa y creciendo mucho en Estados Unidos y América Latina. En el Viejo Continente, por ejemplo, se usa RFID para monitorear ganado, para recolectar la basura, en las industrias madereras y hasta para identificar a las mascotas.

Recientemente la empresa desarrolló un tag que está especialmente diseñado para una fábrica de joyas. Se trata de una compañía que produce 1 billón de dólares en oro anual en Dubai, tiene distribuidores en todo el mundo y necesitaba una manera más simple, segura y rápida de controlar su inventario para los embarques. El tag es muy pequeño, tiene una antena irrompible y se pone en los collares, los aritos y los anillos.
Los lectores pueden leer de a 20 en simultáneo, lo cual permite efectuar un excelente seguimiento comercial de cada producto.