Reto

Esta cadena colombiana opera ocho hoteles en seis ciudades del país: Bogotá, Medellín, Cali, Pereira, Barranquilla y Cartagena. Cada espacio guarda una exclusividad propia para obtener el mayor grado de satisfacción de sus clientes: desde la recepción disponible las 24 horas, sus tres restaurantes, el centro de negocios abierto durante todo el día, la piscina al aire libre, la terraza en la azotea, la sala de fitness y el spa de servicio completo hasta los corredores que atraviesan cada uno de los diez pisos en que se conectan 202 habitaciones. Esta diversidad de zonas que convergen en una misma edificación, en la cual se registra un tránsito constante de personas de todo tipo, desde usuarios comunes como turistas nacionales y extranjeros, empresarios, empleados del hotel hasta invitados de eventos oficiales y personal de logística, obliga a tener un monitoreo completo de la más mínima esquina del lugar que le pueda dar la máxima garantía de seguridad a quien allí se aloja. En noviembre de 2017, la gerente del hotel de Pereira advirtió que el sistema análogo de cámaras que se tenía instalado dejaba muchos puntos ciegos. En ese sentido, al registrarse una eventualidad en la que se quería corroborar la identidad de posibles infractores al reglamento interno o rastrear eventuales autores de alguna conducta malintencionada, punible o no, dentro de sus instalaciones, permanecían una serie de inconsistencias.

Solución

De ahí que la gerente se comunicara con su colega a cargo de otro establecimiento de la cadena en la ciudad antioqueña de Rionegro donde a mediados de ese mismo año, en medio de una ampliación de la estructura hotelera, se había efectuado de manera exitosa la migración de un sistema análogo a uno IP usando para ello tecnología de la compañía Hanwha Techwin. La implementación del SSM, una plataforma de software de administración integral que maximiza la eficiencia de los productos de red Wisenet, permite la supervisión local y remota de imágenes bajo un tratamiento digital para el reconocimiento facial. La arquitectura cliente-servidor presenta una gestion estable del sistema de videovigilancia a través de la configuración de múltiples sitios y clientes. De esa manera, el acceso a videos en vivo / grabados es extremadamente fácil desde sitios remotos, lo que lo hace adecuado para aplicaciones de diversos lugares de mediana a gran escala. Además, su despliegue se presenta más sencillo y económico que un Circuito Cerrado de Televisión (CCTV) al utilizar el mismo cableado proporcionado para el acceso a Internet y consigo la comunicación de datos, sin necesidad de desplegar una infraestructura de cableado coaxial empleado tradicionalmente para la red de videovigilancia. En ese sentido, se instalaron 4 cámaras PTZ (pan-tiit-zoom por sus siglas en inglés) y 39 de la serie QND, las cuales cuentan con seguimiento automático, utilizadas en ese caso junto a cuatro monitores ubicados en una central de monitoreo para validar toda la seguridad perimetral del hotel. La buena acogida que tuvo la integración de ambos sistemas llevó a que un par de meses después el gerente de la sede del mismo hotel en Barranquilla, capital del Atlántico, pidiera a su vez la instalación de 25 cámaras de la misma referencia (QND). Este proyecto se realizó entre 20 y 25 días en los que los ingenieros de la empresa Go Security también se aseguraron de la efectiva compenetración del sistema actual con la tecnología de Hanwha, centrándose en la ubicación de varios equipos que pudieran corregir varios puntos ciegos que se hallaban en la cocina. El proceso finalizó en octubre, un mes antes de la llamada de la gerente del hotel en Pereira con el ánimo de incorporar esta misma solución a la problemática propia de su sede.  

Resultado

A diferencia de las otras dos sedes, en el hotel de Pereira se desinstaló el sistema análogo existente y se pasó directamente a uno IP. Sin embargo, por petición de la propia gerente, se optó por adquirir los mismos equipos instalados en la sede inicial; cámaras QND-6020R de la serie Q de Hanwha Techwin, que cuentan con una resolución máxima de 2 megapíxeles (1920 x 1080), caracterizadas por la detección de movimiento, manipulación y detección de desenfoque, visualización de pasillo y compatibilidad con WiseStream. En este caso lo que se quería atacar eran los puntos extremos del hotel, en particular el ángulo de proyección del ingreso a las habitaciones por parte de los huéspedes, en los que fallaba la nitidez de la imagen. De ahí que se instalaran cerca de 30 cámaras de este tipo, alrededor de tres por piso, incluyendo una por cada restaurante.  

Integración exitosa

“El cliente quedó bien satisfecho”, asegura John Jairo Rengifo, director comercial de Go Security, quien comenta que este tenía cierta inquietud de que, al agregar un sistema nuevo de una marca diferente a la inicial, la inversión de años atrás se fuera a perder. Sin embargo, Rengifo enfatiza en el acompañamiento permanente por parte del ingeniero a cargo para certificar que no hubiera problema alguno con la configuración de esta tecnología. Finalmente, el director de proyectos del mismo integrador, Fernando Quimbay, sostiene que en ninguna de las tres sedes de la instalación se registraron inconvenientes y de manera remota constatan que la integración ha sido exitosa. Tanto que la de Pereira ya le sigue los pasos a su filial que la inspiró a incorporar esta solución y también planea tener una ampliación este año, bajo la misma visión de toda la cadena hotelera de crecer cada vez más de manera sostenible.