FABRICANTES | 12 DIC 2009

La nueva estrella de Sage

Sage S.R.L acaba de cumplir 25 años en el mercado. Desde sus inicios, la empresa comenzó  haciendo exclusivamente desarrollo de software para aplicaciones administrativas y, de a poco, fue incorporando hardware de control de acceso y horario. Hoy importa distintos equipos y los integra con sus aplicaciones. Aprovechando SeguriExpo 2009, la empresa presentó un novedoso dispositivo de reconocimiento facial llamado FaceID F710.



“Es el primer equipo 100% autónomo. En su modo automático, tiene la capacidad de reconocer hasta 500 personas diferentes”, asegura orgulloso Marcelo Michalski, Socio Gerente de Sage S.R.L. Entre otras virtudes, el FaceID F710 no sólo reconoce el rostro de los usuarios, sino que guarda una imagen de cada acceso (otorgado o rechazado). Se trata de un equipo muy versátil, que almacena hasta 70.000 registros y puede usarse tanto para control de horario como para control de acceso. Su velocidad de trabajo es muy buena, ya que reconoce 1500 caras por segundo.

“Con el tema de la Gripe A, pudimos ver la reacción negativa de la gente al poner el dedo en un sensor. Por el contrario, este equipo no es nada invasivo porque el usuario no tiene contacto físico con el dispositivo. Además, se puede poner detrás de un cristal de seguridad porque funciona con una imagen óptica y otra infrarroja. Eso es muy importante, ya que evita que lo rompan o lo roben”, explica Michalski.

Hoy en día, muchos de los equipos faciales funcionan con 2 módulos separados (uno encargado de capturar la imagen y otro que realiza el cálculo). El FaceID F710 integra todo, es 100% portátil y pesa tan sólo 200 gramos. Además, cuenta con un relé que permite realizar controles de puertas y hasta instalarlo en un sistema de molinetes. Entre otras características incluye  comunicaciones TCP/IP, puerto Ethernet, puerto USB para descargar datos y una memoria SD con 70.000 fotos de los accesos.

El FaceID F710 es muy nuevo, pero ya tiene el software integrado para funcionar también como control de acceso y horario. Su precio (u$S 2500) es ligeramente superior al de un equipo biométrico de huella estándar. Fue presentado en el stand de Sage de SeguriExpo 2009 y tuvo muy buena aceptación, ya que los visitantes pudieron enrolarse y así testearlo. Se trata de una nueva estrella que promete y, desde temprano, ya se ganó el reconocimiento de todos.

La educación, una necesidad vital
La actitud del usuario frente a cualquier equipo biométrico se vuelve fundamental. “Si no se adiestra correctamente a las personas que lo usarán, los equipos biométricos pueden fracasar, porque los usuarios pueden no colaborar para que funcione de manera eficaz, poniendo mal el dedo, por ejemplo”, comenta Michalski. “La única certeza que tenemos es que la tecnologia está madura y funciona. Y es por ello que hacemos un esfuerzo grande en educar a los usuarios”.

“Muchas veces le instalamos el sistema al administrador de una empresa y él se encarga de la ardua tarea de entrenar a sus usuarios. Existen estudios que demuestran que los adultos tienen un nivel de falta de 6 a 1 inicialmente. Con educación y entrenamiento, se pueden situar por encima de los jóvenes, que arrancan con un nivel de 1,5 a 1. Sin dudas, la educación en este tipo de dispositivos es algo vital”, concluye.