En un año tan extraño como éste, en el que la mayoría de las empresas no arriesgan demasiado, ustedes han dado un paso enorme al mudarse a estas oficinas. ¿A qué se debe la decisión?
Una empresa puede crecer, pero llega un momento en que hay que cruzar el río. En ese instante, el crecimiento ya no es paulatino sino que es necesario dar un gran salto. En cierta medida, Electrosistemas ha dado ese gran salto porque logramos acumular las reservas necesarias para poder hacerlo, porque siempre apostamos al crecimiento y porque teníamos la convicción de que el gremio merecía un lugar más grande y mejor atención.

¿Y no les dio un poco de miedo apostar a tanto?
Tengo un amigo coreano que hace poco me dijo: “En Argentina el negocio de CCTV no empezó. En Europa y en Estados Unidos hay cámaras por todos lados; acá todavía no”. Y yo creo un poco en eso. Pienso que aún estamos lejos de alcanzar “la meseta”, bastante lejos. Seguramente irán apareciendo nuevos jugadores en el mercado, pero nosotros estamos preparados para que cuando eso suceda ya estemos bien posicionados.

¿Qué cursos ofrecen en sus nuevas instalaciones?
La idea de los entrenamientos es profesionalizar un poco más a los instaladores de CCTV y para ello, brindamos tres niveles de capacitaciones: iniciación, básico y avanzado.Y para saber cuál es el nivel correcto para cada persona, le tomamos una especie de examen.

Además de aulas para las capacitaciones al gremio, ¿con qué espacios cuentan las nuevas oficinas?
Disponemos de 600 m2 divididos en tres plantas, de los cuales 400 están destinados a depósito, y 200 a oficinas administrativas, salón de ventas, sala de reuniones, recepción, laboratorio y espacios comunes.

¿Qué innovaciones tecnológicas de Seguridad pueden encontrarse en las nuevas instalaciones?
El “chiche” que a mí más me gusta es una cámara infrarroja, que graba todo, aún en la oscuridad. Además, tenemos 16 cámaras distribuidas por todo el predio, con las que estamos guardando un histórico de 30 días en un servidor de 1 terabyte. Por último, contamos con controles de acceso biométricos en todas las salas internas, que funcionan también como control de tiempo y asistencia.

De la cocinita al depósito

“Es curioso porque cuando yo empecé con este negocio –hace 6 años- contaba con una oficina en la que tenía un escritorio con un fax y una cocinita tipo kitchenette en donde guardaba la mercadería”, recuerda Ing. Roberto Junghanss. “Comencé medio de casualidad, porque yo siempre fui instalador de CCTV. En el año 2001, compré un equipo armado de DVR y lo fui a instalar a Rosario.Tuve un problema técnico y cuando pedí soporte técnico no obtuve respuestas: ni siquiera conocían el equipo. Asi que ahí decidí importar mis dos primeras placas de Corea: una para ese equipo que estaba instalando y otra de repuesto. Después, un colega me pidió que le vendiera ésa de repuesto y yo decidí comprar cuatro más... y las vendí. Entonces compré 10 más, luego 20… y asi empecé el negocio vendiendo DVR.Y para llevar adelante ese negocio, necesitaba más la oficina que el depósito; entonces guardaba las placas en esa cocinita. Era una oficina con una porción de lugar para la mercadería. Hoy, 6 años después, busqué un depósito con oficinas.