Si tomamos a los testeos que en sus distintas variantes (PCR, serológico, etc.)se realizan y que al detectar una persona con la enfermedad COVID19 como primera herramienta  contra la Pandemia, bien podríamos decir que la detección en personas con  síntomas  de COVID 19, como la temperatura mayor a lo normal, son la segunda herramienta en importancia porque esta detección abarca a mayor cantidad de las mismas, con el agregado de que dicha detección se realiza cuando  ya están  circulando y  en el ambiente público (comercios, bancos, restaurantes, transporte público) o el ambiente privado (empresas, fábricas, oficinas).

Hemos visto una serie de equipamiento específico para luchar contra la diseminación del virus SARS COVd 2 causante de la enfermedad COVID 19.
 

Desde medir la temperatra corporal basal humana, mediante equipamiento sin contacto con la piel, en formato individual como en formato colectivo, la aplicación de estos dispositivos electrónicos, mediante protocolos específicos y reglas de manipulación y control estrictos, han hecho que se haya podido determinar con la precisión que requiere la medicina, en el caso de la medición de la temperatura basal humana, un dato de una persona o varias con fiebre o sin ella, todo de acuerdo a la medición de ese parámetro fundamental para decidir si una persona tiene o no esta enfermedad.

Esta medición se ha convertido en el primer indicio al detectar si la temperatura basal humana está en valores normales o no lo está, con lo cual se ha podido separar a las personas con fiebre alta de las otras que no daban valores anormales y evitar así la propagación de los contagios.

Al utilizar equipamiento  con  registro y almacenamiento de cada una de las tomas de temperatura permite la auditoría de cada una de las mismas, y saber si se realizaron y si fueron correctamente realizadas. 

Luego vino la posibilidad de evitar las aglomeraciones de la gente en lugares de acceso público, que derivan en contactos estrechos, como locales cerrados, llámese supermercados, centros comerciales, estaciones de transporte público, de trenes, autobuses, de colectivos o de transporte aéreo.

Al principio la consigna fue prohibir todo, luego al pasar de los días y meses, la ayuda brindada por los equipos automáticos de control de AFORO o cuenta de personas que entran y salen de un lugar cerrado de grandes dimensiones, le dió otra impronta al sistema de control agregado al control de temperatura basal humana.

Al poder tener un control de aforo en tiempo real, con la consigna de que cada persona puede disponer de una superficie de 9 hasta 16 m2 en ese gran lugar, permite controlar eficazmente la cantidad total en ese ambiente en cada momento, ya que se cuentan los que entran y se les restan los que salen segundo a segundo como base de cuenta en tiempo real. Todo esto con registro permanente y almacenamiento de datos de ocupación, sin los cuales es imposible auditar en forma permanente y dar cumplimiento efectivo a los protocolos o normas emitidas por la autoridad sanitaria.

La utilización de otro equipamiento específico como cámaras inteligentes o VSS con inteligencia artificial, con control de movimieto específico para determinar si puede haber o no aglomeraciones de dos o más personas y dar las indicaciones por intermedio de sido dirigido para evitar el desarrollo de tales conjuntos de personas en un solo lugar.

Estos mismos sistemas pueden utilizarse en medios de transporte público, para poder determinar un viaje seguro, sin aglomeraciones aún en horario pico, en trenes, colectivos, autobuses de larga distancia, aviones u otro medio masivo por la concentración de personas.

También tenemos los equipos sanitizadores por rayos UVC, ahora fabricados en nuestro país, para ayudar en la sanitización efectiva y segura para áreas hospitalarias específicas como quirófanos, salas de terapia intensiva y salas de usos múltiples. Asimismo ayudan a sanitizar contra el virus SARS COVd 2, en empresas en donde es vital por la gran cantidad de personas que circulan diariamente, salas de teatro y salas de cine, asegurando el combate contra esta enfermedad y otras de igual virulencia. La utilización de estos equipos en todas y otras muchas aplicaciones, como ser trenes, colectivos, buses de larga distancia o aviones, asegura un transporte público seguro por la alta desinfección y sanitización que brindan estos equipos y en muy corto tiempo de empleo efectivo.

Todo este equipamiento, utilizado con protocolos prestablecidos y fácilmente aplicables permiten las autoridades competentes, tener herramientas simples y funcionales para tener una lucha frontal contra la difusión de la pandemia de COVID-19 y evitar los contagios masivos por el control ejercido por el uso profesional de este equipamiento.

Estas conclusiones han sido el resultado de los estudios que han realizado los integrantes del Grupo de Análisis y Recomendaciones Técnicas de CASEL, que desde mayo de 2020 han elaborado una serie de escritos acerca del equipamiento técnico apto para realizar importantes ayudas al control de la Pandemia de la enfermedad COVID 19.

Estos equipos forman parte del portafolio de productos que CASEL y sus asociados disponen para la utilización masiva por parte de las autoridades sanitarias del país. 

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